Selección de Talentos

Este es un escrito detallado acerca de la experiencia que vivimos los seleccionadores. ¿Cómo se ve con las gafas de un profesional de selección? Cómo es hoy buscar profesionales competentes en medio de la crisis laboral de este país Colombia? ¿Como podrían ser más asertivos los candidatos?.

Pues bien ha aquí una reflexión que explica parte de estas preguntas. Una reflexión que he concluido después de más de 10 años de trabajo en procesos de selección y de recibir una y otra vez llamadas tipo «por favor me cuentas que debo decir para ser elgido en un proceso de selección?» deben decir la verdad, eso es todo. Pero este es otro capítulo, que amerita otro artículo.

Hoy en día resulta compleja la búsqueda de trabajo, o mejor debería decir empleo, pues los Colombianos pasamos trabajos todos los días, el solo hecho de lidiar con el tráfico, ya es un trabajo bastante complicado. Pero bueno, buscar empleo se he convertido en una misión imposible, más aún conseguir ser contratado en una empresa que ofrezca estabilidad laboral y oportunidad de crecimiento; de las cuales, por cierto, hay muchas en nuestro país.

Las diferentes crisis nacionales e internacionales, ha aumentado considerablemente la oferta laboral, frente a una demanda que apenas cubre un porcentaje mínimo de la población demandante. Las personas se quejan de la falta de oportunidades y por supuesto de tener que cubrir sus necesidades básicas y no tener donde producir el dinero necesario para ello.

A menudo recibo llamadas solicitando alguna orientación para mejorar su hoja de vida, su perfil y ayudar a conseguir algún tipo de trabajo. «Lo que sea» dicen las personas, pues el primo de mi esposo o el hijo de mi mejor amiga, por poner un ejemplo, lleva más de seis meses sin trabajo. Situación que escucho todas las semanas.

Infortunadamente es la realidad palpable de muchos trabajadores Colombianos. Así vamos a ciegas, buscando cualquier oportunidad, cualquier «trabajito» que me de al menos para comer.

Este factor de desempleo creciente, ha propiciado la evolución del perfil del candidato e incluso ha modificado sus rasgos de personalidad. Lanzando al mercado un candidato hambriento y desesperado. Un candidato que haría cualquier cosa, si, cualquier cosa por conseguir ese empleo ofertado.

Comencemos desde le principio; una persona se encuentra en búsqueda activa de trabajo, inscribe sus datos y su hoja de vida en los diferentes portales de empleo, porteriormente comienza a aplicar a las ofertas que requiera de sus conocimientos, experiencia y perfil profesional.

Lección Aprendida 1.

Han visto este letrero en los anuncios de empleo que dice: «Sí, no cumple con los requisitos, por favor no aplique». Pues bien, es importante no solo leer, sino comprender lo que quieren transmitir los seleccionadores cuando escriben esto.

Los profesionales dedicados a la consecusión del talento, comenzaron a mostrar agotamiento físico y mental, desgastándose por largas horas en revisiones de hojas de vida que NO se acercan ni un poco al perfil requerido. Pues sí un cargo requiere un Profesiona Gradudado en Administración, eso no es igual a Profesional Graduado en Diseño Gráfico con amplia experiencia. La capacidad de conciencia y autoevaluación también es importante.

Parecería increíble encontrar este tipo de situaciones en procesos de selección. Pues no nos asombremos tanto; de un total de 500 hojas de vida aplicantes, por lo menos 450 no cumplen ni con el 30% de los requisitos establecidos.

Lección Aprendida 2.

Un vez las personas aplican a la oferta publicada en cualquiera de las grandes plataformas de búsqueda de empleo, se convierten en Hackers, si señor Hackers. Actualmente los diferentes medios y mas aún las redes sociales, entregan mucha información de las personas y estos candidatos presos de la desesperación son expertos en conseguir todos los datos del profesional que publica el empleo.

Así es como uno comienza a recibir correos electrónicos, Whats Apps y hasta Llamadas al numero personal del tipo de: Buenas tardes es que yo apliqué a una oferta que estaba publicada en la red de trabajo y quisiera saber si recibió mi hoja de vida y que tal le parece. Y bueno!!!!! recibo en promedio 500 hojas de vida diarias por cada proceso y generalmente tengo como mínimo de 3 a 4 procesos.

A esto lo he llamado «acoso al seleccionador», del cual más adelante hablaré, profundizando en otros tópicos que evidencian la ansiedad y falta de preparación para enfrentarse a un proceso de selección de forma profesional.

El hecho de escribir, llamar, contar o textear con una clara necesidad de protagonismo, no garantiza que sean escogidos por encima de los demás que esperan a que el proceso siga su curso normal. Lo único que se consigue con esta conducta es NADA, así es nada, porque el seleccionador seguirá revisando sus hojas de vida conforme el proceso se lo exige y hará su trabajo de forma profesional, respondiendo a las necesidades de la compañía que lo ha contratado.

Lección Aprendida 3.

Pues bien decía mi madre este dicho, cuando uno se toma su tiempo, puede revisar, re-escribir y realmente redactar un producto que sea coherente.

Cuando las personas hacen una hoja de vida, en realidad se esmeran por hacer un buen trabajo, se esmeran escribiendo toda su formación educativa y su experiencia laboral de forma detallada, sin embargo, en muchas ocasiones le dejan lo de la ortografía al corrector del computador, enviándo un curriculum con horrores de ortografía, los cuales estoy segura se pasaron, solo por no leer. Es bien importante que las hojas de vida queden impecables, es como querer vender una olla de presión sin tapa, o la casa sin techo. En realidad los errores de ortografía dicen mucho de los candidatos, entre otras envían el mensaje de hacer las cosas por hacerlas.

Conozco más de un colega que descarta candidatos por errores bobos de ortografía. Y confieso, tienen razón.

Como si no fuera sufisciente, el nombre del archivo que contiene la valiosa información de los candidatos, es guardado como: HOJA DE VIDA NUEVA 2018, HOJA DE VIDA ACTUALIZADA, NUEVA HOJA DE VIDA, o los que son más arriesgados HOJA DE VIDA DE YUYIS, NANIS 2018, YAYITA 2018; sólo por poner algunos ejemplos. Ahora bien hagamos la tarea de analizar un poco esta información. Sí a un seleccionador le llega un número X de hojas de vida, todas con el nombre de HOJA DE VIDA NUEVA 2018, como carajos va a saber de quién se trata?

Una hoja de vida debe llevar el nombre de la persona, de lo contrario no tenemos como identificar cada candidato y no, entre otras cosas, no debe llevar el nombre de hoja de vida, pues se sabe ampliamente que se trata de una «hoja de vida».

Sugerencia, hay que ser más cuidadoso con la forma como se presenta la información, se trata de conseguir una posición laboral, que en teoría sea agradable y que genere beneficios económicos, profesionales y personales, para uno como empleado.

Lección Aprendida 4.

Cuando tuve la oportunidad de estar desde el otro lado, siempre consideré que tener una actitud respetuosa y prudente hacia el profesional que se encarga de la selección, era un aspecto clave para mostrar la imagen de una persona estructurada y un profesional coherente.

Hoy en día me encuentro con todo tipo de «acosadores al borde de la locura», perdón a todos los que se sientan aludidos, ofendidos o etiquetados. No es mi intención molestarlos, solo que tengan una idea de lo que en realidad están transmitiendo y un poco que se pongan en los zapatos nuestros.

Actualmente es increíble la forma como algunos candidatos abordan al profesional, por eso voy a permitirme contar algunas anécdotas que he experimentado en esta labor de selección de talentos.

Uno. Lunes 8:00 PM. Suena el timbre del WhatApp

Candidato: Buenas noches señora Lina, apliqué a una oferta que estaba publicada en Buscotrabajo.com, quería saber sí recibió mi hoja de vida. 

Yo: No tengo ni idea, son las 8 de la noche y estoy con mi familia. Por favor escriba mañana en horas laborales al número que aparece en la oferta para mayor información.

Candidato: Que pena molestarla, me podría confirmar el número al que debo escribir.

Yo: SIN RESPUESTA

No puede ser que le estés diciendo a una persona, que no son horas de escribir, que no sé como se levantó mi número telefónico personal y que está siendo imprudente, y siga pa´lante haciendo preguntas impertinentes. No se vale, no es adecuado.

Suele suceder, que no contentos con esto, escriban una y otra y otra vez por el WhatsApp, haciéndose los que no saben nada. Y disculpándose mil veces, porque que pena molestarla. Convirtiéndose en víctimas de la pobre situación.

Dos. Una de las más recientes anécdotas que tengo para compartir, fue un día cualquiera que sonó mi teléfono y me preguntan. Buenas tardes este es el celular de la Señora Liliana Rodríguez, en medio de la confusión, sonreí en el fondo, pues confieso que hice la pilatuna, entonces respondí con un NO tajante. Dos minutos más tarde repicó de nuevo el teléfono; hablo con la señora Lina María Rodríguez?. Claramente era la misma persona, obviamente respondí que si, que era yo, que en qué podía colaborarle. 

Luego de explicarle a este candidato el proceso y los pasos a seguir, procedí a enviarle un correo, identificándome como Lina María Rodríguez Rojas, y especificando las pruebas, pasos y tiempos del proceso, firmado por Lina María Rodríguez Rojas, Psicóloga especialista en Selección. 

Como dirían mis amigos los abogados, los hechos sucedieron un Miércoles 3:00 PM.

Hasta este momento todo normal, Viernes de la misma semana 7:30 PM, suena el WhatsApp. Mismo Candidato

Candidato: Buenas noches señora Liliana.

Yo: 

Otra vez????? NO PUEDE SER, al menos tres veces repetí mi nombre, envié un correo identificándome y adicional firmado con todas mis credenciales. Esto califica como falta de atención al detalle, además de imprudencia por llamar un viernes en las horas de la noche. Yo creo que a las personas con el tema de la tecnología, redes sociales y el fácil acceso a todos los mecanismos de comunicación, han perdido los límites entre lo que es la realidad laboral y los temas personales.

A propósito, no solamente se han perdido los límites cuando están participando en un proceso de selección, se han perdido los límites de los amigos, de los jefes, de los empleados y de los colegas. Se perdió la intimidad a la que uno tiene derecho cuando llega a ese lugar sagrado llamado hogar.

Tres y última

Sucede con bastante frecuencia, que los candidatos aplican a ofertas laborales muy por debajo de su compensación salarial, esto quiere decir que se inscriben a una oferta de $1.500.000, cuando su salario es de $3.000.000 dada su experiencia y perfil profesional. 

En el fondo, nunca he podido descubrir qué esperan con este tipo de estrategia. Pues evidentemente continúan durante todo el proceso, para salir al final con frases como: «Ay no es que yo pensé que podían subir el salario». Estos después de haberles confirmado y re-confirmado la compensación salarial y las condiciones laborales. Y ellos estar de acuerdo.

No es justo hacerle perder el tiempo al seleccionador, no esperen que la vida y las empresas se comporten de forma justa, si desde el momento en que están participando, no son fieles a unos acuerdos y principios básicos de comunicación.

Como lo había mencionado anteriormente, a menudo recibo muchas llamadas de mis amigos o familiares, preguntándome acerca de cómo contestar en una entrevista o pruebas de selección. Mi recomendación es simplemente que sean como son, aunque parezca obvio. Sean como son, pero sean prudentes. Hacer el ejercicio de ponerse en los zapatos del seleccionador, les permitirá darse cuenta que no es rico estar recibiendo mensajes de tipo laboral, después de las siete de la noche, todos los días. Se han puesto ha calcular cuántas personas pueden escribir, por un solo proceso de selección?. Pues imagínese como es eso, cuando un seleccionador puede tener hasta diez procesos paralelos.

Aquí, no se trata de juzgar a nadie, tampoco de convertirse en el gurú de la selección y enseñarles a las personas como deben actuar en un proceso. Ya lo he dicho antes, yo no enseño nada.

De lo único que se trata es de mí punto de vista, particular y egoísta, si así lo quieren llamar. Se trata de verlo como yo y algunos colegas lo vemos, pues somos seres humanos como todos los demás. Nosotros no tenemos el poder de nada, el único poder que tenemos es el de hacer bien el trabajo para el que fuimos contratados.

Tengo la firme esperanza que esto pueda ayudar a hacer más equilibrado el trabajo de mis colegas, así como más coherente el actuar de nuestros queridos candidatos.

Comentarios dudas o preguntas, siempre van a enriquecer la vida, así que son bienvenidos.

Deja tu comentario en la pestaña hablemos, generemos un debate inteligente, haz valer tu opinión.

Dra. Linita con sus mascotas

Suscribete a mi Curso

"Libera el Monstruo que llevas dentro"

Comparte este post con alguien que le pueda interesar

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Libera el monstruo que llevas dentro

¡Suscribete al curso gratuito!